Immersive Yoga 

En esta clase de yoga, la práctica se transformó en un viaje sensorial. Las paredes se llenaron de proyecciones de colores que invitaban a relajarse y conectar, mientras un aroma suave y envolvente acompañaba cada movimiento. No solo se trató de posturas, sino de vivir el momento con todos los sentidos abiertos.

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La sesión culminó con un brunch pensado para prolongar esa sensación de calma y bienestar, creando un espacio para compartir y recargar energías.

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Como en todos nuestros eventos, la experiencia fue mucho más que una clase: fue una invitación a descubrir el yoga desde una nueva dimensión.